El pasado sábado volvimos a celebrar la tradicional noche toledana de la AAB, que como sabéis consiste en visitar un lugar realmente oscuro y observar hasta que el cuerpo aguante o las obligaciones permitan. Volvimos a elegir el emplazamiento de la ermita de San Olav en Covarrubias, ya que tiene un fácil acceso y además disfruta de unos cielos bastante oscuros. Las previsiones hablaban de cielos despejados, pero al atardecer se desarrollaron nubes tormentosas que afortunadamente se disiparon al aparecer las primeras estrellas. A eso de las 22 horas con el cielo azul, pudimos observar un impresionante bólido del este hacia el norte, que bien podría ser chatarra espacial, quien sabe si relacionada con el cohete chino Long March 5B, que había caído unas horas antes en el Índico. Disfrutamos del cielo nocturno con una temperatura mas que agradable y en muy buena compañía. Ya queda menos para la toledana del 2023...
Os adjunto un par de imágenes, una del grupo de asistentes y la otra de Sagitario y Escorpio, tomada con un filtro difusor para realzar el color de las estrellas y también hace mas visibles las formas de las constelaciones.

Fuentes: