Tras semanas de quietud en la superficie solar, parece que nuestra estrella  de nuevo sale de su letargo y nos vuelve a ofrecer alguna débil actividad en forma de manchas solares, aunque no demasiado activas. En la parte superior podemos ver AR2804 y en la inferior AR2805 curiosamente situadas cerca de la misma longitud solar pero en hemisferios contrapuestos. La imagen es del pasado martes 23 aprovechando un día con gran transparencia atmosférica, algo que ha sido imposible repetir después debido a la obstinada calima. En el recorte inferior, podéis ver la extraordinaria protuberancia quiescente situada al sur del disco solar, amplificada gracias al uso de una lente barlow 2,5X y con una imagen de la esfera terrestre para que nos podamos hacer una ligera idea de su impresionante tamaño.

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